miércoles, 21 de junio de 2023

La orilla

En esa parte de la playa las olas rompen de forma irregular porque es una zona que se dibuja entre arena y rocas.

Con la marea vacía las olas son realmente pequeñas, son pequeños sonidos que de forma continuada me acompañan en los paseos tempraneros.

De vez en cuando coinciden todas a la vez y el sonido se incrementa algo para después producirse un gran silencio. Un silencio que no es roto por los ruidos de la avenida, donde todavía no han despertado las terrazas, ni por los coches de las calles aledañas, que todavía no se desesperan en atascos.

Son momentos de silencio que permiten conectar con el milagro del movimiento.