sábado, 2 de marzo de 2024

alemana

Tenía unos 70 años. Delgada. Una figura esbelta que permitía adivinar un bellezón desde joven hasta ahora.
Hace dos años que había fallecido su marido. 
Era alemana. Hablé con ella en inglés.
Desde que llegó a su apartamento no salió de la terraza. 
Llevaba años viniendo a Puerto Rico.
No paraba de fumar y de beber. 
Venía para quedarse dos semanas.
Me saludó varias veces mientras escribía esto. Lo último que se imagina es que estoy escribiendo sobre ella.