La niña tenía unos 13 años. Su padre se tambaleaba borracho, viejo, deteriorado.
La niña evitaba que se cayera mientras lo llevaba a casa.
Su madre se había desentendido del problema tras el divorcio. Aguantó diez años de alcoholismo. Ni uno más.
La niña es flaca. Le cuesta mantener al padre. Se ve la tristeza y la preocupación incrustadas en su cara.
La niña sabe que tiene que hacerse cargo de un futuro incierto.