Luna apareció primero. Era diminuta. Vio la solución a sus problemas inmediatos y fue a buscar a su hermano, responsable ella. Supo elegir, siempre saben. Dieron amor hasta el último día. No pidieron nada a cambio. Se fueron juntos para no echarse de menos. Acaso para seguir juntos. Partieron rodeados de amor un año después de llegar. Luna siempre estaba allí, acompañando. Gus era todo amor y ronroneo. Era imposible no enamorarse. Quienes tuvieron la oportunidad de conocerlos nunca los olvidarán. Dejaron atrás un hogar y una familia que les echará siempre de menos.
