martes, 5 de mayo de 2020

las emociones

Las emociones que siente otra persona no tienen una relación de causalidad con nuestras emociones. Aunque genéticamente nuestra especie está predeterminada a contagiarse de las emociones ajenas, no hay nada que materialmente haga que la ira de alguien cause ira en nosotros. Simplemente somos capaces de percibir esa ira y a partir de ahí vienen ciertos pensamientos que provocan nuestra ira.
En nuestra evolución como especie tuvo un sentido práctico para subsistir pero ahora lo ha perdido. 
Si la ira de alguien tiene consecuencias prácticas para nosotros como puede ser económicas o que limite nuestros recursos podemos tomar decisiones al respecto. Pero eso no implica que nuestro estado emocional dependa del estado emocional de la otra persona. La mayor parte de las veces no hay una consecuencia práctica. Simplemente sentimos ira porque vemos que la otra persona la siente.