Aureliano

 Aurelio había accedido a la administración pública en el turno de discapacitados por un déficit auditivo. Tenía una cara algo deforme y algunos problemas físicos al caminar. 

 Probablemente esta limitación auditiva le llevó a no aprender ciertas reglas sociales debido a un círculo vicioso en el que sus limitaciones le hacen no aprender como los demás y sus deficiencias de aprendizaje hacen que la gente se aleje de él.

 La chica guapa de su trabajo iba a desayunar con Aurelio.  Ella sabía que podía dar lugar a malos entendidos, pero su corazón era enorme para aceptar al que viene a pedir ayuda. Aurelio ya estaba señalado en su trabajo por su insistencia torpe a la hora de acercarse a una chica. La etiqueta la conocían todos. La chica guapa le decía que debía empezar de cero en otro trabajo, en otro destino, que era lo mejor para él. Aurelio sentía mariposas con la chica guapa y su inocencia le llevó a decirle que se quería alejar  para no entorpecer la nueva relación de pareja que empezaba ella. Como si fuera recíproco lo que sentía. 

 Una voz femenina y sin tacto le dijo que cómo podía pensar que un pibón así se iba a fijar en él.

 Anoche lo vi en el Kopas en el concierto del cantante de Danza Invisible.

  Estaba solo. Y estaba solo porque no tiene amigos. Viéndolo se palpaba lo que tiene que ser la soledad a la fuerza. No tener a nadie con el que compartir tus alegrías, tus miserias, tu pasado, tus berrinches, tus ilusiones. Y nadie entre tanta gente guapa de noche iba a acercarse a él. 

 En su foto de perfil del Facebook hay un solo like entre casi 200 "amigos". Es una foto del 1 de mayo. 

la risas

Yo quería construir

Tus pilares de risas y sexo no aguantaron el edificio que yo quería construir y ocurrió lo inevitable, se vino abajo. 

Me encantan tus besos.

Siento tus ganas, tu deseo, tu amor, tu apuesta por mí.

Me encantan tus gemiditos mientras abres la boca para besar.

Besarnos donde no podemos llegar más allá de un beso.

 

Margarita

Conocí a Margarita siendo 30 años más joven que ahora. 

Margarita tenía una verdad que defendía como podía y que sólo muchos años después se encargó su hijo de demostrar en los tribunales. Margarita me lo contó hoy. Yo siempre la creí aunque nunca supe porqué, ni hasta qué punto.

Su hijo tenía un padre y ella solo un amante, solo uno, que no quiso saber de él ni de ella. En sus cabezas hay paz y justicia.

Ese mismo hijo cometió un grave error en su vida. Las drogas hacen estragos más allá de lo que podemos imaginar desde las vidas ordenadas que llevamos algunos. Ella lo va a visitar todas las semanas a la cárcel. Es su hijo. Explica con tranquilidad el error que cometió. Muy grave, sí, pero es su hijo. 

Las noches

Deseando poder despertar a tu lado otra vez. Sentir cómo buscas el contacto con mi piel desnudándote y acurrucándote conmigo. Sentir cómo buscas con tu mano mi sexo y lo acaricias con amor, queriendo sentirme. Quiero escucharte darme los buenos días con esa música en tu boca y con esa alegría por estar a mi lado. Adoro pasar una noche entera a tu lado.